Piel
Tratamiento de la piel
El uso de la piel de diferentes animales para protegerse del frío ha sido parte importante en la historia de la humanidad. En el último siglo más que para resguardarse del frío las prendas de piel han sido una moda. En la actualidad su uso es muy bajo debido a su alto precio y a la mayor sensibilidad en el respeto hacia los animales. Disponemos de los productos necesarios para lavar prendas de vestir de piel y para restaurarlas.
Disponemos de productos para el lavado (en agua o en seco), para el reengrase así como para dar el acabado adecuado a cada tipo de piel. Cuero, ante, serraje, doblefaz, nubuk, pekari. Etc. Cada tipo de piel requiere un tratamiento diferente. Más que “lavar” una prenda de piel hablamos de “restaurar” una prenda de piel.
Lavado en agua
Podemos lavar pieles en agua con programas de lavado especiales y productos formulados específicamente para piel. En el lavado de piel en agua eliminamos fácilmente mucha suciedad magra pero tenemos más dificultad con la suciedad grasa.
Lavado en Seco
Podemos lavar pieles en seco (con disolventes) con programas de lavado y productos especialmente formulados para piel. En el lavado en seco eliminamos fácilmente mucha suciedad grasa pero tenemos más dificultad con la suciedad magra. Es importante utilizar los productos adecuados que eviten eliminar la propia grasa de la piel, que la vaciaría de su cuerpo, tacto y color.
Acabados
Una vez la prenda está limpia podemos aplicar diferentes productos para conseguir restaurarla a su formato original: pigmentos para cuero, lacas para fijar los pigmentos, modificadores de tacto, grasas nutritivas, colorantes, hidrofugantes, etc.